18/7/09

¿Cómo?

Te levantas un buen día, te tomas una taza de té de la belleza, un vaso de zumo de naranja, tu novia te llama para darte los buenos días, te arreglas, quedas con un familiar para comer, vas a un asiático de lujo que te encanta y te pones hasta arriba. Todo bien, sin problemas, sonrisas y normalidad. Un sábado más.

Sales del restaurante y te vas para casa.

Y, sin comerlo ni beberlo, aparecen los problemas. ¿Cómo?, ni idea. ¿Por qué?, ni idea. Llegas a casa y los problemas se acumulan.

Sin haber hecho nada malo, sin haber hecho mal a nadie, me encuentro de repente con un panorama de cabreos y yo en el centro de todos los cabreos. Y no he hecho nada. Bueno sí, me he ido a comer a un restaurante con mi tía.

Así que el sábado normal se convierte en un sábado de perros. Y yo con ganas de mandar todo a la mierda. Trato de estar bien con todo el mundo, repartirme entre unos y otros, pero al final tanto querer agradar a unos y a otros y siempre sales perdiendo, porque nadie se le ocurre pensar cómo te sientes y qué vueltas tienes que dar en la vida para que ésta cobre sentido y tenga equilibrio. Yo más no puedo hacer, estoy fatigado y tengo ganas de llorar.

¿Cómo puedo sentirme así, si no he hecho nada malo, si no me he equivocado en nada???. ¿Cómo?. Que alguien me lo explique por favor. ¿Cómo se puede poner el mundo en tu contra cuando no haces nunca nada malo?.

2 comentarios:

Un pedacito de mí dijo...

Pablo, no te atormentes. Que sepas que los problemas siempre vienen. aunque no hagas nada. Porque la vida es injusta, así, como suena y por desgracia.
Y, además, nada es perfecto.

Ánimo!

Anónimo dijo...

lo siento, la culpable de todo soy yo. solo se me ocurre decir:lo siento Pablo. kk