1/2/09

Disfrutando de pequeños placeres

El humo de la taza de mi té earl grey describe pequeñas y efímeras siluetas en el aire. Mis cinco sentidos están puestos en las hojas del libro que me estoy leyendo. Mi manta me sirve de refugio en una tarde gris de un día que empezó nevando y que se ha mantenido tal cual, mustia e impertérrita. Pero disfruto de mi té, de mi libro y de mi manta.

Pequeños placeres.

Durante muchos años no supe que significaba disfrutar verdaderamente de las cosas. Extraer su jugo, su esencia. Y hacerlas tuyas. Ya expliqué en un post anterior que no fue hasta los 22 años cuando abrí los ojos al mundo y lo empecé a hacer mío, cuando supe lo que era verdaderamente disfrutar de algo, cuando empecé a conocerme a mí mismo y pude perfilar mi vida, mi corazón y mi alma con las maravillas que nos ofrece el mundo.

Hoy, con una taza de té, un libro y una manta, pienso de nuevo en ese antes y después, en ese punto de inflexión de mi vida. Y me digo a mí mismo. "Menos mal que espabilaste chaval, porque te lo estabas perdiendo todo. absolutamente todo".

De verdad, me gusta mucho vivir. Y lo mejor es que aún me queda tanto y tanto por conocer.

1 comentario:

Anónimo dijo...

me encanta tu filosofia de la vida, creo que todos deberiamos tomar nota de tus palabras y aplicarnoslas. kk