1/10/09

Bye, bye

Romántica despedida. Yo, agitando la mano, detrás del torno, diciendo "adiós, adiós, hasta mañana". Y el majo del guarda del metro diciéndome, "quiere pasar a despedirse, le dejo un billete y pasa". "No, no (sonriendo), ella se va a casa, la veo mañana", dije yo.

Así que resulta que hay gente sensible por estas latitudes. Qué majo el guarda. Se pensaba que se trataba de una larga despedida. Él, tan considerado, quería que yo corriera tras el vagón del tren como en las películas. Corriendo y corriendo hasta el final del andén, mientras el tren siguiera su caminar más allá de mi corazón.

Gracias a Dios, el vigilante se hizo una película, porque yo a mi peque la veo mañana y me tiene que decir qué tal me queda el polo de manga larga rojo de Desigual que me voy a comprar por la tarde.

En fin. Fue bonito mientras se imaginó.

1 comentario:

Anónimo dijo...

hello hello, soy yo la peque, jo es tan romantico. kk